picazón en la piel seca

Ante todo, la piel seca se define por las sensaciones que experimenta quien la padece. La persona se siente incómoda, la piel se tensa, se siente rugosa, y la aplicación de un producto apropiado contribuye a mitigar las molestias.

En ocasiones, los síntomas pueden ir acompañados de picor o ardor.

El médico diagnosticará si se trata de piel seca (también denominada xerosis) a partir de dos criterios objetivos: un aspecto pálido y desvitalizado, signos clínicos epidérmicos de descamación, agrietamiento, en ocasiones inflamación y pérdida de elasticidad. Las irregularidades de la superficie de la piel pueden llegar a ser más graves que la sequedad.

Además, las pieles secas son un terreno favorable para la aparición de eccema, particularmente en forma de eccematide acromiante (o pitiriasis, manchas blancuzcas y resecas en la piel), que aparece de pronto en mejillas y brazos de los niños (siguiendo un cuadro de dermatitis atópica).

Dentro de la piel seca, se pueden distinguir varios estados:

Las pieles secas son un terreno favorable para la aparición de eccema, particularmente en forma de eccematide acromiante (o pitiriasis, manchas blancuzcas y resecas en la piel), que aparece de pronto en mejillas y brazos de los niños (siguiendo un cuadro de dermatitis atópica).

Por otro lado, la piel deshidratada puede presentarse en cualquier tipo de piel, ya sea seca, mixta o grasa. Dicha deshidratación sólo se da ocasionalmente, cuando, por alguna condición específica y esporádica, la piel de la persona no obtuvo los nutrientes necesarios para retener el agua. 

A diferencia de la piel deshidratada, la piel seca o muy seca es una condición crónica, que se debe, en general, a una disfunción de carácter genético: se trata de un tipo de piel, como lo son las pieles grasas o mixtas.

Hay que tener presente que sólo el médico diagnosticará si se trata de piel seca (también denominada xerosis) a partir de dos criterios objetivos: un aspecto pálido y desvitalizado, signos clínicos epidérmicos de descamación, agrietamiento, en ocasiones inflamación y pérdida de elasticidad. Las irregularidades de la superficie de la piel pueden llegar a ser más graves que la sequedad.

 

piel seca o muy seca

Hablar de piel seca o muy seca designa un tipo de piel en particular. Es una condición permanente que se caracteriza por sensación de tirantez en rostro y cuerpo, y cuya causa es una anomalía de la barrera cutánea; a esta piel le faltan agua y lípidos, es delgada, presenta enrojecimientos y textura áspera.

piel deshidratada

Todos los tipos de piel en un momento u otro de la vida. Es reversible y pasajero; se caracteriza por sensaciones de tirantez localizada y puntual, y se debe a una mala fijación y pérdida de agua. Hay un malestar a nivel cutáneo, se perciben asperezas y a veces descamaciones pero es sólo que a la piel le falta agua. Descubre ahora todo lo que quieres saber sobre la piel seca aquí.

¿Cuáles son las causas de la piel seca y muy seca?

La superficie de la piel sana está naturalmente protegida por la película hidrolipídica, que, como su nombre indica, está formado, principalmente, por agua y lípidos (sebo). Esta barrera impermeable es una defensa de la piel ante las agresiones externas y previene la pérdida de agua.

Cuando hay un desequilibrio de agua y lípidos de la capa superior de la epidermis, la función de barrera no puede llevarse a cabo de forma eficaz, y la piel empieza a manifestar diversos grados de molestias, como se ha explicado anteriormente.

Además de la sequedad en la piel innata (o constitucional), también existe la sequedad cutánea adquirida por factores externos :

  • factores externosclimáticos, ambientales
  • enfermedades generales provocadas por patologías cutáneas (como eccema atópico o psoriasis)
  • afecciones tiroideas, diabetes, carencias nutricionales
  • tratamientos médicos

Dentro de la piel seca, se pueden distinguir varios estados, entre los que se pueden nombrar los siguientes:

  • Piel seca
  • Incomodidad pasajera
  • Sensación tirante
  • Descamación 
  • Agrietamientos y fisuras
  • Xerosis preatópica
  • Piel áspera y rugosa
  • Manchas de sequedad extrema
  • Irritaciones

piel seca o muy seca

Algunas personas nacen con piel seca, eso es parte de su patrimonio genético.

Sin embargo, la piel también puede modificarse con la edad: la piel es más seca en el caso de los niños (a excepción de los recién nacidos, pero a esta edad la pérdida de agua es más severa). 

Durante la adolescencia se vuelve más grasa, después recupera su condición seca durante la madurez (cuando las glándulas sebáceas y las glándulas sudoríparas pierden funcionalidad). 

Finalmente, en el envejecimiento cutáneo natural provoca un adelgazamiento epidérmico, porque la renovación celular ya no es tan eficiente, y por otro lado la capa córnea tiende a engrosarse.

 

Como ya lo hemos dicho, si siente malestar persistente, lo mejor es consultar a un dermatólogo, quien sabrá diagnosticar si se trata de un problema crónico de resequedad o sólo de deshidratación y le dirá cómo hidratar la piel.

Si la piel se vuelve seca de repente, hay que preguntarse qué está provocando esta condición,

  • Puede ser un cambio en el ambiente o estar realizando alguna actividad que contribuya a la sequedad de la piel (nadar en piscina, el uso de jabones o geles de ducha muy agresivos),
  • O alguna enfermedad o un tratamiento médico (como anticolesterolémicos).

Si se identifica un factor responsable, hay que corregirlo en la medida de lo posible.

 

Además de la incomodidad que provoca, la piel seca favorece la penetración de agentes irritantes o alérgenos y  puede promover la aparición o perdurabilidad de ciertas patologías (como eccema o psoriasis)

En este sentido, se justifica la necesidad urgente y permanente de rehidratarla, por lo que hay que seguir los siguientes consejos:

  1. En primer lugar, hay que beber suficiente agua. Trata de beber 1.5 litros de agua al día (salvo contraindicación médica).
  2. En todos los casos hay que escoger productos de higiene personal que no sean agresivos para la piel, es decir, no detergentes y, si hace falta, hidratantes y nutritivos (según la zona y el nivel de sequedad, pueden ser en forma de leche, crema, bálsamo, pomada o aceite). 

El objetivo es disminuir la evaporación del agua y mantenerla en cantidad suficiente en la epidermis, al mismo tiempo que se repara la barrera cutánea alterada.

Hay que evitar los ambientes demasiado calurosos y cerrados.

Mujer bebiendo agua

En cuanto a los hábitos de higiene, básicamente lo que debes hacer es lavarte el rostro una a dos veces al día con un limpiador suave que no altere la barrera cutánea y secar con golpecitos suaves, sin frotar.

Lava tu cara con ayuda de Bioderma

En cuanto a los cuidados post higiene, se recomienda que, por la mañana y la noche, se aplique un tratamiento hidratante y emoliente para calmar la sensación de tirantez y proteger la piel de las agresiones externas. Procura nutrir la piel de rostro y cuerpo con productos específicamente formulados para piel seca.

Si tu médico te diagnostica con piel seca, Bioderma te ofrece Atoderm, una gama completa de productos de higiene y de cuidado para el rostro y el cuerpo adaptados a las pieles secas, muy secas o con tendencia atópica. Estos productos son de uso diario, pero también como acompañamiento de un tratamiento para el eczema o los picores.

 

También es importante que uses varias veces a la semana mascarillas para hidratar la cara hechas con ingredientes que nutren profundamente. 


Así que, no lo dudes más; si en tu piel se presentan algunas de estas molestias, acude con un profesional de la salud de la piel para determinar los tipos de productos que debes usar.

Mujer aplicándose crema en la piel