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Un cepillo de limpieza facial es típicamente un dispositivo manual que funciona con baterías y tiene un cabezal de cerdas que se mueve continuamente. Tiene como característica una presión constante que hace que la limpieza facial sea distinta a solo limpiar con una toallita de algodón.
Cuando se combinan con un limpiador pueden ayudar a la piel hinchada y obstruida si mejoran la circulación facial y el drenaje linfático, pero no siempre es adecuado, en especial, si se tiene algún problema en la piel.
A pesar de la lista aparentemente interminable de aparentes beneficios, los cepillos de limpieza definitivamente no son adecuados para todos. Muchas personas usan los cepillos faciales incorrectamente.
Un dispositivo con demasiada estimulación y un cepillo que es demasiado rígido pueda causar inflamación. Aunque hay opciones suaves, el uso excesivo de cepillos altera el pH de la piel, lo que agota el manto ácido protector y puede aumentar la producción de grasa.
La piel enrojecida e irritada es común cuando se usan cepillos sónicos porque las cerdas rígidas dañan los delicados capilares y causan microabrasiones.
¡Nunca uses un cepillo para quitar el maquillaje!, ya que en realidad pueden empujar el maquillaje más profundamente en tus poros, y eso es algo con lo que no quieres lidiar.
Riesgos de usar cepillos faciales
Practica siempre una limpieza suave para evitar la hiperpigmentación posinflamatoria y no olvides que BIODERMA tiene una gama de dermolimpiadores que actúan eficazmente sin lastimar tu piel.
¿Cómo se puede utilizar un cepillo facial, aprovechar los beneficios y evitar los efectos negativos?
La respuesta es muy simple: no lo uses con demasiada frecuencia.
Se recomienda que cepilles la cara, junto con un limpiador, dos días a la semana. Si tu piel se seca y tu tono de piel se vuelve desigual, redúcelo a una vez por semana, pero consúltalo primero con tu dermatólogo.
Escucha a tu piel
Si estás usando un cepillo facial, no uses un exfoliante químico agresivo. Y si estás usando un cepillo facial, no permitas que nadie más lo use, es de uso personal, tal como tu cepillo de dientes.
El mejor momento para usar tu cepillo facial es por la noche. De esta manera, eliminas la suciedad y la contaminación ambiental del día; no obstante, lo mejor siempre será que tengas una rutina de doble limpieza con productos especiales como el agua micelar de BIODERMA que limpia profundamente con un algodón y un dermlimpiador especial para tu tipo de piel. Estos pasos mejorarán tu rutina de skincare.
